Partieron colectivos desde General Pico y Santa Rosa, además de vehículos particulares para participar del encuentro que congregó a unas 40 mil mujeres en Salta el 11 y 12 de octubre. Reclamaron el fin de los femicidios, el aborto legal, seguro y gratuito, la intensificación de la lucha contra la trata de personas, una ley de emergencia sobre violencia de género, entre otras cosas.
El encuentro comenzó el sábado con la apertura en un estadio salteño. Las contradicciones de la sociedad afloraron en ese acto, en que grupos de izquierda buscaron impedir el ritual de la Pachamama con que comenzó el encuentro y el discurso inaugural.
Es que pretendían que se diera prioridad al testimonio de Rocío Girard, una mujer violada por su padre biológico cuyo testimonio trascendió en los medios de comunicación. Hubo forcejeos, situaciones de boicot contra la comisión organizadora y finalmente las palabras de Rocío.
Por la tarde comenzaron los talleres repartidos en 63 temáticas diferentes que se multiplicaban cada vez que se agrupaban unas 40 mujeres, elegían una coordinadora y dos secretarias que iban consignando todas las posturas.
El próximo año se vertirán en un libro en el que el pensamiento, las posturas, los reclamos y los testimonios de las mujeres quedarán plasmadas en el papel. En este encuentro se repartieron los libros con las conclusiones del encuentro del año pasado, realizado en San Juan.
Los talleres siguieron el domingo por la mañana y la tarde. Las tensiones de la sociedad también volvieron a emerger en varios talleres, con espacios partidarios que buscan imponer sus ideas por encima de las ideas del feminismo. En ocasiones se generaron debates interesantes y otras se redujeron a monólogos sin escucharse.
Pero además, se generaron alrededor de las escuelas y en las plazas públicas múltiples actividades culturales de concientización: obras de teatro, música, radio abierta, presentación de libros, proyección de películas, entre otras.
Los artesanos y artesanas, los grupos políticos con sus pancartas, sus marchas y sus cánticos y el movimiento que generan unas 40 mil mujeres encontrándose y compartiendo experiencias dotó a Salta de una impronta diferente.
El domingo a las 18 horas comenzaron a marchar las 40 mil mujeres junto a muchos hombres feministas por el centro de Salta. Durante las 25 cuadras en que transitaron se hicieron sentir al ritmo de tambores y cánticos.
Desde mujeres de noventa años a jóvenes que apenas empiezan a ejercer su ciudadanía, desde mujeres de villas miserias o de pueblos perdidos en la frontera hasta mujeres de sectores acomodados económicamente, desde kichneristas o anti kichneristas a mujeres sin definición partidaria, todas marcharon bajo banderas, bailes o cánticos. Solo hubo incidentes menores entre partidos de izquierda que pugnaban por lugares.
Hubo quienes utilizaron su propio cuerpo para inscribir consignas, quienes usaron carteles, o música. “Si el Papa fuera mujer, el aborto sería ley”, “que momento, que momento, a pesar de todo les hicimos el encuentro”, “alerta, alerta, alerta los machistas, América Latina será toda feminista”, fueron algunos de los cientos de cánticos que se unían en la marcha.
Hubo incidentes con un pequeño grupo de mujeres que forcejearon con católicos frente a la catedral, pero la inmensa mayoría marchó pacíficamente ante la mirada de los salteños y salteñas que en general, asentían con la cabeza o aplaudían.
A la noche se realizó la peña y el lunes el plenario de conclusiones y la elección de la sede del encuentro 2015. El próximo año será Mar del Plata es lugar que recibirá nuevamente a unas 40 mil o más mujeres que se visibilizan, que reclaman, que construyen una nueva identidad individual y colectiva que socava los presupuestos machistas de desigualdad, sumisión y violencia.
|