La temporada de avistaje de ballenas en las costas
de la provincia de Chubut, que se extiende desde mayo
a diciembre, son el atractivo principal de la zona que
tiene como epicentro de servicios a la ciudad de Puerto
Madryn, distante a 783 kilómetros de Santa Rosa.
Los rituales de reproducción son la fuerza poderosa
que convoca a las ballenas, constituyendo un espectáculo
maravilloso para el viajero, que se repite y crece cada
año, gracias a la labor de protección
que desarrollan diversos organismos de la zona.
Pero no todo es ballenas y nada más, conocer
la maravillosa Reserva Natural de Península Valdés
con una superficie de 400.000 hectáreas es la
parte más dulce de este postre vacacional.
El Litoral Marítimo Atlántico Argentino,
y más específicamente las aguas vecinas
a la Península de Valdés: Golfo Nuevo,
Golfo San José y Caleta Valdés, conforman
la principal área de cría de la Ballena
Franca Austral, siendo la ciudad de Puerto Madryn el
centro de servicios por excelencia, con buena hotelería,
gastronomía y empresas que brindan todo tipo
de posibilidades de recreación y diversión,
especialmente a partir del contacto con la naturaleza.
Avistaje embarcado
Embarcado puede uno acercarce a enormes ejemplares de
ballenas, delfines o lobos y elefantes marinos. Los
avistajes se realizan en embarcaciones de diversas capacidades,
desde 8 hasta 30 pasajeros.
Estos programas de avistaje duran aproximadamente una
hora según la época del año, las
condiciones climáticas y la cantidad de animales
que se encuentren en la zona, que se acercan a distancias
increíbles que permitiéndonos su visualización
pormenorizada. Durante el recorrido suelen verse también
delfines, que se desplazan en grupos de 8 a 12, realizando
sus simpáticas acrobacias que dan a los visitantes
un espectáculo inigualable.
Avistaje desde la costa
A 18 kilómetros de la ciudad de Puerto Madryn
puede realizarse un interesante avistaje costero de
ballena franca austral viendo a las ballenas y sus crías
a escasos metros de la costa, resoplando y mostrando
sus colas y aletas en todo momento, en una playa de
ensueño llamada «El Doradillo». Para
acceder a esta singular costa tendrás que tomar
la Av. Domeq García y circular con dirección
Norte, tomar la ruta Provincial Nº 1 que se empalmará
con la ruta Provincial Nº 2 y recorrer 4 kilómetros
de asfalto y 14 de ripio.
La característica más importante de la
playa es que presenta una pendiente muy pronunciada,
lo que le permite a las ballenas acercarse a la costa
para parir o bien para ser cortejadas por los machos
que realizan un baile de seducción para poder
copular con las hembras. Trepando un alto acantilado
donde se emplaza un mirador construido por la Fundación
Patagonia Natural, se puede realizar el avistaje desde
el cómodo montículo donde se brinda información
sobre las características y hábitos de
las ballenas.
Reserva Natural de Península Valdés
Está maravillosa reserva, declarada Patrimonio
de la Humanidad, es digna de ser visitada en todas sus
distintas partes, tomando como base de partida la ciudad
de Puerto Madryn. La Reserva está conformada
por: Punta Norte, Punta Delgada , Punta Pirámides,
Caleta Valdes, Isla de los Pájaros e Istmo Ameghino.
Entre numerosas especies de aves y mamíferos
marinos, costeros y terrestres, se pueden avistar las
ballenas francas australes, y también elefantes
y lobos marinos y los pingüinos de Magallanes.
Punta Pirámides: Apostadero reproductivo
de lobos marinos de un pelo, que pueden avistarse desde
un acantilado de 50 metros de altura, también
encontramos una colonia reproductiva de gaviota cocinera
, cormoran roquero, gaviotin sudamericano, desde diciembre
a marzo cuando se reproducen. La Ballena Franca Austral
se estaciona desde mayo hasta diciembre.
Punta Norte: Apostadero de elefantes y lobos
marinos de un pelo , es la zona de mayor frecuencia
de ataques de orcas a los lobos . Además encontramos
al zorro gris, peludo patagònico, tucu tucu,
cuis, martinetas y lagartijas.
Punta Delgada: Apostadero de lobos marinos de
un pelo y elefantes marinos del sur. Los lobos marinos
de un pelo se encuentran durante todo el año
y elefante marino del sur desde mediados de agosto hasta
abril.
Isla de los Pájaros: Isla conectada al
continente en bajamar, se ubica a 32 km de Piramides,
500 metros antes del Istmo Ameghino. De gran valor biológico
ya que es un area reproductiva de diez especies diferentes
de aves marinas costeras, como la gaviota cocinera,
biguas, ostreros, cormoranes roqueros, garzas blanca
y bruja, pingüinos de Magallanes, pato vapor y
juarjual.
Caleta Valdés: Apostadero reproductivo
de elefantes marinos y colonias reproductivas de pinguino
de magallanes, gaviota cocinera, garza bruja, biguà,
cormorán cuello negro y garza blanca. Zona de
ataque de orcas. Los elefantes marinos se extienden
de agosto a marzo donde se concentran para reproducirse.
El resto del año el número de ejemplares
que se avistan disminuyen debido a su desplazamiento
hacia el mar para alimentarse y se dispersan por la
costa. Es un área de avistaje frecuente de ballenas
francas, algunas especies de delfines y varias especies
de aves, tanto marinas como terrestres. Tambien varias
especies de reptiles (lagartija, yarará ñata)
y mamíferos (peludo patagónico, piche
patagónico, cuis, tucu tucu, gato del pajonal,
gato montés, zorro gris, mara y guanaco).
Qué más hacer en Puerto Madryn:
Buceo: es la Capital del Buceo y Capital Subacuática
Argentina por excelencia. Sus aguas calmas y transparentes,
su variada fauna, sus lugares amplios para el buceo
hacen de esta localidad el punto ideal para comenzar
esta práctica.
City Tour: tendrás la ocasión de
conocer esta fantástica e histórica ciudad
realizando un entretenido tour por las regiones más
ilustres del lugar.
Ecocentro: Circulando por el boulevard costero
Almirante Guillermo Brown y a tan sólo 5 minutos
de la ciudad, podrás encontrar el Ecocentro Puerto
Madryn, un emprendimiento científico y cultural
de avanzada.
Museo Provincial de Ciencias Naturales y Oceanográfico:
a orillas del Golfo Nuevo, sobre las calles Domecq Garcia
y Menéndez.
Estancia San Guillermo: A 17 Km. de la ciudad
de Puerto Madryn tendrás la posibilidad de practicar
Turismo Rural, conociendo las formas en que se practicaba
la ganadería, el manejo de aguadas y el modo
en que el hombre y el medio ambiente se desarrollan
en la zona.
Pesca: es una ciudad que además de sus
singulares atractivos cuenta con las más amplias
condiciones para el desarrollo de una pesca deportiva
como comercial.
Turismo Aventura: La multiplicidad de espacios
que presenta para realizar deportes de riesgo, extremos
o de turismo alternativo, colocan a la ciudad como una
de las más elegidas.
Excursión en 4 x 4 a Cerro Avanzado: Una
excelente alternativa de vivir la aventura en una apasionante
excursión por sinuosos caminos de ripio y por
gigantescos médanos en una camioneta 4 x 4 todo
terreno.
Museo y Centro de Interpretación: Un sitio
recomendable para conocer antes o después de
haber realizado cualquier tipo de avistaje en la Reserva
Natural Península Valdés.
Reserva Provincial Punta Tombo: Saliendo de Pto.
Madryn hacia el Sur por la ruta nacional 3, y tras 70
km de recorrido encontrarás el cruce con la ruta
provincial Nro.1, la cual te conducirá a Punta
Tombo, a 107 km.
Reserva Provincial Punta Loma-Cerro Avanzado:
Sobre el Golfo Nuevo, al Sur de la ciudad, fue creada
para proteger la Colonia de Lobos Marinos.
Playa El Arenal Elefantes Marinos: Una
excursión imperdible y que te dejara extasiado
donde podrás divisar la famosa colonia de elefantes
marinos.
Dique Florentino Ameghino: Por la ruta Nac. 3
y rumbo a Trelew, encontrarás una rotonda en
la cual tomarás la ruta nacional 25 con destino
a Esquel, luego de 117 km arribarás a la localidad
de Las Chapas en donde girarás a la izquierda
y recorrerás 12 km hasta el Dique Florentino
Ameghino.
La Ballena Franca Austral
Este curioso animal, presenta un cuerpo curvado y no
posee aleta dorsal. Las hembras adultas miden entre
13 y 16 mts., en tanto que los machos alcanzan sólo
los 12 metros.
Los adultos pueden llegar a pesar entre 30 y 40 toneladas.
En la boca, que tiene forma curva, se disponen unidas
a la mandíbula superior, unas 260 placas o barbas
córneas, llamadas «baleen», de donde
proviene el nombre castellano de «ballena».
La utilidad de estas barbas que llean a medir hasta
2,50 metros, se pone de manifiesto cuando el animal
se alimenta, sirviéndoles de filtro o «colador»
para retener su comida, que fundamentalmente esta constituida
por pequeños camarones conocidos como «krill».
La Ballena franca Austral presenta callosidades, que
se distribuyen en la parte superior y costados de la
cabeza, consistentes en placas de epidermis engrosadas
y endurecidas que, por lo general, se hallan habitadas
por grandes cantidades de un peculiar crustáceo
(balanus), vulgarmente llamado «piojo de la ballena».
Los ballenatos (crías) presentan un color más
claro que los adultos. Debajo de la epidermis tienen
una gruesa capa de grasa de entre 14 y 36 centímetros
de espesor, que los protege de las bajas temperaturas
de los mares australes.
En la parte superior de la cabeza y detrás de
la callosidad, se encuentran dos orificios por los que
el animal respira, los espiráculos, y desde los
cuales expulsa violentamente el aire de sus pulmones,
éste se condensa debido a la diferencia de temperaturas,
y dibuja dos columnas en forma de V, hecho que dió
origen a la creencia que las ballenas lanzaban chorros
de agua.
La gestación dura 12 meses y por igual período
de tiempo, la hembra amamanta a la cría o ballenato,
que en el momento de nacer mide 5,5 metros.
Cuando estos animales están en capacidad de reproducción
regresan, con intervalos de tres años, al área
de Península Valdés buscando aguas seguras
y tranquilas, para parir una sola cría.
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