| En una reciente reunión realizada en Santa Rosa, integrantes de distintos clubes de caza de la provincia manifestaron su desacuerdo y preocupación por las «medidas desacertadas» implementadas desde el gobierno de La Pampa para la temporada de caza mayor del ciervo colorado que comienza en estos días.
Específicamente en cuanto a las disposiciones para la caza de ciervo colorado en campos libres, señalaron «que producen que no se reduzca la caza sino que se aumente la caza ilegal; ponen en riesgo nuestros objetivos y tienden a la desaparición de los clubes de caza que vemos desmerecido nuestro trabajo debido a medidas meramente recaudadoras y poco criteriosas».
Para poder practicar la caza se debe contar con permiso de caza, permiso del dueño del campo donde se practique y además este campo debe estar inscripto en un registro a tal efecto. La Disposición de Caza del gobierno provincial sólo indica que «para la inscripción el propietario del establecimiento deberá acreditar la titularidad del inmueble presentando el último recibo del impuesto inmobiliario y completar los datos de la Planilla de Inscripción de Campos» pero los cazadores aseguran que el trámite no termina ahí ya que el productor tiene que afrontar otras cargas impositivas y burocráticas, cuestiones que no figuran en la mencionada Disposición de Caza.
Por otro lado, los dirigentes de clubes –en su condición de idóneos en la actividad cinegética- destacaron que en las reuniones de la Comisión Asesora de la Fauna Silvestre y su Hábitat, realizadas con anterioridad, sus propuestas son desatendidas por la parte oficial y que los plazos que imponen las Disposiciones «son incoherentes ya que los clubes son comunicados de estas novedades a menos de 15 días del inicio de la temporada de caza» subrayaron.
Más incoherencia
Asimismo insistieron en la incoherencia dentro del mismo gobierno: «mientras la Subsecretaría de Turismo promociona la actividad cinegética de La Pampa a nivel internacional -hecho que resaltaron como muy positivo-, la Subsecretaría de Asuntos Agrarios toma medidas contrarias y pone trabas para que no se practique la cacería, evidenciando una gran desarticulación entre los organismos gubernamentales» expresaron.
Nota al Gobierno
Como cierre de la mencionada reunión, los presentes elaboraron un documento para elevar a las autoridades del Gobierno Provincial que regulan la actividad, texto al que REGION® tuvo acceso y que reproducimos en recuadro aparte. Allí se cuestiona los impedimentos que tienen en la práctica los campos que deseen inscribirse para cazar ciervos e incluisve señalan un exceso de controles al cazador extranjero. Los dirigentes lamentaron además, algo que muchas veces señalamos desde estas páginas y que es la falta de mediciones para un ranking local de los trofeos que se van fuera del país, perdiéndose el control deportivo de la actividad, sobre la base de un recurso que nos pertenece.
Link al índice de las Disposiciones de Caza 2005 en este sitio>>
Documento de los clubes al Gobierno
«Nos dirigimos a Ud. a los efectos de manifestar nuestro malestar y preocupación por las nuevas reglamentaciones y medidas desacertadas de los funcionarios de las áreas correspondientes, que entorpecen el desarrollo de la actividad cinegética dentro de la provincia de La Pampa.
Como Institución idónea en el tema, podemos adelantar que esta temporada se van a vender el 50% menos de los permisos de ciervo que se vendieron años anteriores y por el contrario se van a vender mayor de cantidad de permisos de jabalí, ya que los cazadores están optando por este ejemplar, a modo de tener, al menos, una habilitación y justificación para salir a cazar. Esta fuerte disminución en la venta de los permisos no es un indicativo para pensar que en esta temporada no se van a cazar ciervos, sino todo lo contrario, ya que los ciervos sí se van a cazar pero no se van a legalizar.
Esto está relacionado con las disposiciones para la Inscripción de los campos libres, poniendo cada vez mayores requisitos y obligando de alguna manera a los propietarios de los campos, quienes creen que sólo deberán pagar Ingresos Brutos, cuando en realidad a esto hay que sumarle el 21% del IVA y ganancias, involucrándolo en un círculo engañoso, máxime teniendo en cuenta que muchos de estos propietarios no lucran con las cacerías, sino que la practican sin obtener rédito de ello. Podríamos decir, que esto ocurre en el 90 % de los casos, y sin olvidarnos mencionar a los dueños de campos que pretenden cazar en su propiedad y deben pagar por ello. No debemos descartar la incertidumbre que ronda en torno al tema, ya que habrá que esperar a que finalice la temporada para que los dueños de los campos sepan cuánto tienen que pagar, cuando es un derecho que nos asiste el conocer de antemano cuáles son las obligaciones tributarias de cada interesado, ya que las autoridades competentes se basan erróneamente en costos supuestos y muy alejados de la realidad.
Esta situación nos perjudica a todos: a los clubes de caza, que llegaremos al fin de la temporada sin trofeos de ciervo para medir, atentando con esto seriamente contra nuestra utilidad y esencia. Con gran desconcierto llegaremos a la fiesta de fin de año, que se verá convertida en una simple reunión de amigos, porque el objetivo fundamental, el de premiar los mejores trofeos de la temporada, se verá coartado por este motivo.
Pero también la provincia se verá perjudicada, ya que además de la merma de cazadores, no habrá trofeos pampeanos para mostrar a otras provincias y al exterior y no existirá control o estadística veraz sobre la cantidad de ciervos cazados en La Pampa.
Estas nuevas políticas generadas para regular la actividad cinegética ponen en riesgo nuestros objetivos y tienden a la desaparición de los clubes de caza, quienes permanentemente realizamos un gran esfuerzo y ahora vemos desmerecido nuestro trabajo debido a medidas meramente recaudadoras y poco criteriosas.
De un tiempo a esta parte desde la Subsecretaría de Turismo de la provincia se promociona intensamente, tanto en nuestro país como en el exterior, la caza mayor como uno de los productos turísticos que tiene La Pampa, haciendo especial hincapié en la brama del ciervo colorado, y considerando que es necesaria su difusión por ser uno de los atractivos valiosos que tenemos. Estamos totalmente de acuerdo con esta política convocatoria de la actividad cinegética, pero no entendemos por qué otros organismos de este gobierno se empeñan en echar por tierra todo este trabajo de la mencionada Subsecretaría, tomando medidas contrarias y poniendo trabas para que no se practique la cacería, evidenciando una gran desarticulación entre los organismos gubernamentales. Ahora no sólo los cazadores foráneos elegirán otros destinos para practicar la cacería, sino también los pampeanos emigrarán a otras provincias donde resulta menos complicado y burocrático llevar a cabo esta actividad deportiva.
Queremos manifestar además nuestra inquietud por las últimas actuaciones de los organismos de contralor para con los cazadores provenientes del extranjero, ya que los controles que realizan son traumáticos y hasta abusivos, tratándolos a ellos y a quienes los traen al país como si fueran delincuentes. Consideramos que se debe revertir el proceso para no caer en la mediocridad, aprendiendo de los países del primer mundo .
Para el club, medir un trofeo, para el cazador obtener una buena pieza e ingresar al ranking pampeano o al ranking nacional, son los hechos que nos movilizan porque llevamos la cacería en lo más profundo de nuestro ser y ahora vemos que cada temporada es una posibilidad menos para hacer lo que más nos gusta». |
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