Otros tiempos
El Ing. Torroba constituyó la empresa constructora «Todam» (Héctor Torroba - Rodolfo y Antonio D’Adam) en Santa Rosa, con la que realizaron obras como la «parte nueva» del Hospital Lucio Molas, la Terminal de Ómnibus, la Municipalidad, entre otras. «Construimos más de 300 casas individuales, algunos barrios que hacíamos nosotros en las épocas del Banco Hipotecario Nacional, también algunas escuelas y hospitales en el interior de la provincia. Llegamos a tener 120 obreros jornalizados y prácticamente realizábamos todas las obras con nuestros propios obreros, ya que no existía el subcontratista. Teníamos una pequeña fábrica de puertas y ventanas, también de mosaicos con mármoles reconstituidos, además vendíamos materiales... De manera que era una actividad bastante intensa. Pareciera raro, pero no teníamos empleados administrativos: los tres socios manejábamos todo y hacíamos todo» aseguró.

Paraboloides hiperbólicos
Dentro de muchas historias relacionadas con el trabajo y el desarrollo de la profesión Torroba rescató una anécdota de cuando construyeron la Terminal de Ómnibus de Santa Rosa (que fue inaugurada en 1962): «Teníamos unos paraboloides hiperbólicos, que el cálculo no era sencillo. Me acuerdo que yo hice el cálculo y me llamaba la atención que me salía una altura de sólo 4 centímetros. Entonces traté de ir a Buenos Aires a consultar algunos ingenieros amigos, consulté al ing. Arturo Biñoli y me mandó a ver al ing. Hilario Fernández Long (quien fuera Decano de la Facultad de Ingeniería y Rector de la UBA), un gran elemento. Me dijo: ‘Venite a la tarde que te doy todos los resultados’... ¡Yo había tardado 7 u 8 días en calcular esos paraboloides hiperbólicos!. Esa tarde me da todos los resultados, y le pregunté ¿cómo es posible?, me dijo: ‘Mirá, te comunico que la ingeniería cambió, ahora está todo tabulado, lo sacamos de libros tabulados porque la cibernética avanza tanto que va a cambiar la función de ingeniero calculista, estudioso de la profesión y demás’. Y después vino lo que todos sabemos, que hemos perdido un poco de ese profesionalismo original de la época». Esta anécdota de la década del 60 tal vez marcó el inicio de la introducción de la informática en la ingeniería.

La obra pública
«Durante mucho tiempo yo actué como único ingeniero y única empresa, de manera que no teníamos gran competencia. Todo era muy claro, las cosas de falta de ética que se hablan ahora no existían, era distinto, muy distinto. La obra pública significaba mucho, generaba trabajo. Se invertía en las empresas». En cuanto a la construcción Torroba consideró que «aquel que hace una obra está invirtiendo, y genera trabajo, que es polifacético porque no sólo es para el albañil. Todos los países en crecimiento tienen una importancia excepcional en la construcción».

Propuesta
«Le propuse al Consejo Profesional que editara un trabajo sobre la ayuda a la infraestructura que dio la ingeniería y la arquitectura a La Pampa. Porque las infraestructuras viales, en energía, agua, comunicaciones y transporte, son las bases que permiten un desarrollo de nuestra provincia. El análisis y el estudio de qué infraestructura necesitamos debería ser la prioridad número uno. Y la ingeniería puede aportar mucho, decir lo que ha hecho y lo que habría que hacer» señaló Torroba.
«Los profesionales tenemos que adelantarnos a los problemas generando soluciones. Cuando aparecen estos problemas, el político que es el que tiene que resolver y ejecutar, puede tomar estas soluciones. Este es uno de los déficits que tenemos ahora. Por eso sería interesante esta publicación sobre el aporte de la ingeniería, la arquitectura y también la agrimensura en la infraestructura de La Pampa» sostuvo el profesional.

El Acueducto
Torroba participó en la creación del mencionado Consejo Profesional; y además de su trabajo en el ámbito privado fue funcionario de Vialidad Provincial y del Ente Provincial del Río Colorado; también presidente de la Regional La Pampa San Luis del INTA. Consultado sobre su opinión acerca de la obra del Acueducto del Río Colorado (recordamos que es Ingeniero Civil con orientación hidráulica desde 1944) expresó: «Me gustaría tener 4 ó 5 días para hablar del tema. Con respecto al Acueducto: no tiene relación la obra con la necesidad. El mismo proyecto del Acueducto dice que hay que mantener la estructura de los acuíferos porque un colapso en el Acueducto no se puede resolver con reservas. De manera que se necesita, además del Acueducto, mantener el sistema de acuíferos. Entonces viene el tema económico, una obra multimillonaria que recién ahora está llegando a Santa Rosa, que además debemos mantener los acuíferos... Es un gasto que en la provincia se lo puede disfrazar de muchas maneras pero la educación y la salud tienen mucho más importancia».

Agregó «me asusta el costo de explotación del Acueducto, que al final lo vamos a pagar todos. Profesionalmente no quiero opinar porque considero que ha de ser un proyecto bien elaborado aunque pésimamente ejecutado en sus comienzos». También aclaró que «es un tema que lamentablemente ha tenido un viso político y entonces resulta muy difícil analizarlo desde el punto de vista de la verdad pura».

Por último, en el contexto del «Día del Ingeniero», Torroba remarcó la importancia del estudio de la infraestructura en La Pampa, que señaló como el factor que determinará la posibilidad de crecimiento, y subrayó la siguiente frase de Stephen Covey: «Si seguimos haciendo lo que estamos haciendo, seguiremos consiguiendo lo que estamos consiguiendo».