Nuestros lectores no son seres anónimos, porque a ellos les dedicamos nuestro trabajo cotidiano.
Elizabeth Tuma

La educación a través de la comunicación constructiva permite la adquisición de conocimientos. Cuando se entretiene sin educar no se colabora ni a la formación ni al diálogo responsable con la gente.
La capacitación no debe ser sólo intelectual, sino ética. El esfuerzo inteligente es un buen ejemplo constante que ayuda para afirmar una buena escala de valores y conductas, contribuyendo a la creación de vínculos y afinidades que fortalecen una democracia genuina.
El aprendizaje como proceso gradual, pero intenso, conlleva a tomar decisiones de corto y largo plazo.
Los que forman opinión no siempre están bien informados y eso puede generar una degradación en los valores. Las verdades a medias, ¿son analizadas a través de la mitad cierta o de la otra mitad falsa? ¿Se sabe cuál es una y cuál es otra?
El hombre sociable observa a su entorno, y a su vez es observado por éste. El negociador debe saber dialogar sin agresividad.
La improvisación permanente sobre temas trascendentes genera riesgos innecesarios que cuesta mucho asumir. La responsabilidad es de todos los que sostienen un silencio cómplice, por miedo o por metódica ignorancia.
Los problemas superficiales se transforman en conflictos de fondo, si no se busca la manera de solucionarlos o acotarlos.
Todos somos corresponsables para que exista equidad en el crecimiento. La claridad en los comportamientos ilumina la ruta a seguir. La ambientación recíproca y adecuada hace más tolerable el trabajo y las tareas en común, para llegar a un mejor nivel de vida y de paz.
La violencia no está sólo en los pobres; hay ricos que también lo son. Como hay más pobres que ricos hay mayor número de personas violentas entre los que viven en la miseria. Pero si tuvieramos en cuenta los porcentajes por sectores o extractos ¿quiénes estarían más arriba...?
La falta de lealtad auténtica afecta la solidez de las instituciones. La fidelidad sólo es válida si hace a la verdad de todos, caso contrario puede llegar a representar una conspiración grupal.
Por respeto al derecho ciudadano no debemos comprar a los avisadores que auspician programas de comunicación que deforman a la sociedad con malos ejemplos, que al masificarse vulgarizan perversiones como si fueran normales. Frente a esas aberraciones,  alguien podría pretender que el matar no debería ser sancionado penalmente, porque desde la antigüedad es algo común... y siempre se hizo...

Carlos Besanson