La mala información deforma. 
                                                  C.B

Tenemos que saber interpretar la información cotidiana para evitar caer en errores que nos hagan perder el tiempo y nos lleve hacia una vida mucho más accidentada.
El maltrato en el diálogo es una forma de discriminación. El autocontrol inteligente evita el control ajeno. El duro aprendizaje cotidiano que se llama experiencia puede llegar a tener un costo alto si no tenemos por un lado la autocrítica suficiente, y por otro la ecuanimidad para valorar los errores ajenos, o la malicia planificada.
El desarrollo físico que nos transmiten los años de nuestra niñez y juventud, no alcanza para seguir creciendo sino le agregamos la suficiente experiencia que obvie la pérdida de fortaleza corporal, haciendo valer la fuerza y la inteligencia de un espíritu que las conoce todas y por lo tanto esta atento para cruzar la calle de la vida, sabiendo que siempre muchos ilegalmente van de contra mano.
No hay duda que dejaremos de crecer cuando caemos en forma crónica en la desorientación, el miedo y la amargura.
Los hechos muchísimas veces violan el derecho. También el falso conocimiento nos quita inteligencia en el razonar y obrar. Aquellos que siguen aprendiendo pueden seguir teniendo.
Si la justicia humana no es rápida y equilibrada todos perdemos el tiempo de vida que justifica nuestra existencia y razón de ser.
¿Cuál es el saber que ocupa lugar? ¿Y quienes pagamos el costo de ese espacio mental desaprovechado por su contenido negativo e inapropiado?
Las teorías pueden convertirse en realidades si no son falsas o engañosas. La realidad, a veces aburrida, puede sumar o restar a muchos o a pocos, pero existe mientras no participemos en una metamorfosis social y personal que sume o reste.

Carlos Besanson