- Algunos dirigentes pueden llegar a ser cleptómanos.
Gaston Besanson, a los 19 años
- …Otros aprenden a hacer los trucos de los magos.
C. B
Así como muchas veces hemos escuchado, en broma, que determinada vecina está un poquito embarazada, lo contradictorio de este concepto podría aplicarse, al que roba un poquito ¿casi no es un ladrón?
El decrecimiento en la salud ética de los individuos que integran una sociedad, a la larga termina perjudicando a aquellos que no actúan de buena fe. La frase el que roba a un ladrón tiene cien años de perdón va marcando la pauta, que a largo plazo la corrupción termina fastidiando a los mismos corruptos, que sufren las consecuencias de los actos de sus discípulos o competidores.
En un programa de televisión, sugerí que no nos consumamos en la sociedad de consumo.Quienes caen en esta contradicción, controvierten los valores, porque tener acceso al consumo implica disponer de los medios destinados a cubrir necesidades, pero no tendría que significar el sustituir objetivos y fines por lo que son, fundamentalmente, instrumentos de acceso.
Diferenciarse por la ostentación, o por el derroche, es una manera pública de demostrar el origen fácil del dinero. Ninguno, a quién le haya costado esfuerzo ganarlo, lo va a malversar. En cambio el dinero originado en la corrupción, mal habido, es mal gastado de manera tal que se llenan de objetos y servicios para disimular la ausencia moral.
Una cosa es el bienestar, justamente logrado, y otra el despilfarro del esfuerzo ajeno indebidamente apropiado. El placer, si no hace bien, se convierte en una futura adicción que nos hace perder la próxima felicidad. Pasarla muy bien a un muy alto precio nos resta lentamente la seguridad futura. La flor, lejos de sus raíces originales, declina rápidamente.
Nadie quiere convivir en una sociedad en estado de descomposición. No son solamente los malos olores emergentes, los que tornan incómoda la existencia, porque a veces perfumes engañosos esconden sucios efluvios. Es la corrupción generalizada la que finalmente envenena nuestros alimentos cotidianos sean éstos materiales o espirituales
Quienes crean que pueden vivir en entornos amurallados, que en apariencia los protegen, sepan que con el tiempo éstos se vuelven en cárceles de lujo, en donde pierden la libertad de moverse externamente con seguridad.
Los medios de comunicación se han convertido, para ciertos dirigentes, en el objetivo para llegar, o mantenerse. Por lo tanto, para ellos, los medios son parte de los fines buscados. Se vende hoy un candidato como un simple producto. El compre ya hace al marketing político, buscando generar una serie de reflejos condicionados, similares a los que investigó el premio Nobel Pavlov (1849 - 1936) aplicados, sobre todo, a los perros.
¿Es que nos estarán tratando como canes, subordinados a quienes nos dan de comer? ¿Es esa una función ciudadana?
Cuando vemos, o recordamos, a un político participar de un juego de azar ¿cuál es el dinero que arriesga, el propio o el nuestro? Las virtudes desvirtuadas terminan como una necrológica del espíritu.
En los desorientados, todo es provisional y fugaz. Las simples hipótesis no alcanzan si no buscamos las certezas.
Carlos Besanson
Publicado en el Diario del Viajero n° 797, del 2 de agosto de 2002 |