La Asociación Forestal Argentina -AFoA- celebró sus “bodas de brillantes” que sin dudas, representan un legado histórico al frente de un sector que tiene hoy el potencial de ser el motor para una nueva, creciente y pujante bioeconomía nacional con proyección global.
En 75 años de historia, son muchos los hitos que pueden encontrarse en el progreso de una entidad que nuclea, lidera y representa al sector forestal argentino. Integrada por empresas, productores forestales, estudiantes y profesionales independientes vinculados al sector forestal y a la industria y servicios asociados, AFoA está también presente -mediante sus sedes regionales-, en las zonas de máximo desarrollo forestal sostenible y de cobertura nacional: AFoA Misiones, AFoA Corrientes, AFoA Río Uruguay (sur de Corrientes y corredor del Río Uruguay de Entre Ríos), AFoA Delta y Pampeana (Provincia de Buenos Aires, Delta bonaerense y Entre Ríos). En su destacable derrotero, ha sido responsable de los más importantes hechos de fundamental importancia para el sector forestal y foresto industrial del país.
Es así como, ya en 1948, es responsable de la sanción de la “Ley de defensa de la riqueza forestal” (Ley N.º 13.273) llenando así un vacío legal que impedía encarar políticas forestales en forma integral. Esta ley reconoce la importancia económica, social y ambiental de los bosques argentinos.
Ha impulsado, además, ya en las décadas del 50 y 60, las primeras reuniones de articulación y diálogo de carácter nacional del sector. Trabaja también en su ordenamiento y fomento integral de la industria, mediante una gestión federal y sustentable.
Publica libros y una revista que salió en papel por casi 40 años. En 1969 lleva adelante la realización del “Primer Congreso Forestal Argentino” al que asistieron más de 400 personas, un verdadero éxito en esos años. Al cierre de este evento, quedó constituido un “comité permanente” para la organización futura de otros congresos. Vendrían luego otras experiencias de reuniones forestales, tanto de alcance nacional, latinoamericano como mundial. De hecho, Argentina fue sede mundial dos veces (1971 y 2009) del Congreso Forestal Mundial, organizado por la FAO convirtiéndose en el único país que se ha repetido como punto referencial.
En 1998 y luego de un trabajo prolongado e intenso -que demandó casi dos años de articulación entre el sector privado y el público-, se da sanción a la ley 25.080 “de promoción de inversiones para bosques cultivados” que es la columna vertebral del sector y norma directiva aún en vigencia, la cual ha sido ya prorrogada por 10 años en dos oportunidades (2008 y 2018).
Colaboró también en la elaboración de la Ley Nº26.331 de ordenamiento ambiental de bosques nativos sancionada en 2007.
Uno de los hechos destacados en su historia es en 2004 cuando firma con el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social un acta de acuerdo -aún vigente- por la cual AFoA en colaboración con UATRE, es designada como “Organismo certificador de trabajadores forestales”. Una tarea que actualmente realizan ambas entidades en todo el país de forma incesante, en la que ya se han evaluado y certificado por competencias a más de 7.000 personas, dando mayor seguridad y empleabilidad a las y los trabajadores del sector. En pro de la sostenibilidad, se subraya la colaboración en el desarrollo del sistema argentino de certificación forestal por gestión sostenible (CERFOAR) y el apoyo a la creación de la oficina nacional del sistema de certificación forestal FSC.
Desde 1946, AFoA ha sido una participante activa de todos los espacios de diálogo público-privado, tanto en el ámbito nacional como provincial, representando al sector forestal. Actualmente, es parte del Consejo Foresto-Industrial Argentino (CONFIAR) que reúne a las entidades representativas de la cadena de valor foresto-industrial, las que participaron en la elaboración del “Plan Estratégico Foresto-Industrial 2030” junto con los representantes del sector público y entidades de la sociedad civil, que marca el trabajo a desarrollar durante los próximos años (disponible en afoa.org.ar)
“Existe un ideal de una nueva Argentina Forestal, que genera materia prima sostenible para alimentar industrias y sectores estratégicos como ser las energías renovables, la construcción de viviendas; el papel (el país importa unos 1.000 millones de dólares al año en papeles) y biorefinerías que aportan a múltiples productos sostenibles, como los textiles y nanocelulosa entre otros rubros”, opinó Osvaldo Vassallo, presidente de AFoA.
El país tiene actualmente un patrimonio de 1,3 millones de ha. de plantaciones forestales, el mantenimiento de la promoción es una herramienta imprescindible para lograr los 2 millones de hectáreas en 2030 y alcanzar los objetivos asumidos por el Gobierno en el Acuerdo de Paris como aporte para la mitigación del cambio climático. “Este sector lidera el aporte a la nueva industria verde. Con las condiciones de seguridad jurídica y estabilidad macroeconómica necesarias se podrían captar inversiones por al menos 7.000 millones de dólares y triplicar las exportaciones del país en poco más de 10 años” completó el directivo.
Desde la Legislatura pampeana informaron sobre el dictamen favorable para adherir a ley de inversiones forestales y de desarrollo del sector acuícola, alcanzado en la sesión del 27 de abril.
Ese día se constituyó un Plenario de comisiones de Asuntos Agrarios y Ecología para recibir a Fernanda González, directora de Recursos Naturales de La Pampa, y a su equipo de trabajo, con el fin de tratar dos proyectos de la diputada Alicia Mayoral y de los diputados Oscar Zanoli, Ariel Rojas y Roberto Robledo.
El primero tiene que ver con la adhesión a la Ley Nacional 27487, que prorroga y reforma la Ley 25080 denominada Ley de Inversiones Forestales, mientras que el segundo se refiere a la adhesión a la Ley Nacional 27231 de Desarrollo Sustentable del Sector Acuícola. Ambos fueron dictaminados favorablemente por mayoría, y por minoría fijando posición en el recinto.
En cuanto a la adhesión a la ley nacional que reforma la Ley de Inversiones Forestales, Fernanda González expresó: “Nos pareció muy buena esta iniciativas. Si bien no tenemos mucho desarrollo en esto, es importante la adhesión para poder tener los beneficios. La fortaleza que tenemos es que contamos con el conocimiento técnico. Y lo importante es estar preparados para aquellos que quieran desarrollar estas actividades”.
A su vez, reveló que “la forestación de tipo industrial casi no se ha desarrollado. El espíritu de la ley nacional fue de fomento. En nuestra provincia tenemos programas vigentes y así y todo nos está costando mucho poder fomentar esta actividad, pensando en la conciencia sobre la deforestación. Todos los años por suerte se van incorporando industrias, y de a poco se va tomando conciencia”.
Por otro lado, en el tratamiento de la adhesión a la ley sobre desarrollo del sector acuícola, dijo que “se plantea una situación similar como la anterior. Es importante adherir porque se crea un fondo de incentivo de la actividad. Es importante que esté creado este fondo, para estar además preparados legalmente para el desarrollo. Esto antes no estaba. Igualmente hay que dejar en claro que porque esté la adhesión no significa que vayamos a hacer cosas que no sean viables. Pero insisto: es importante tener las herramientas ante cualquier situación”, finalizó la funcionaria ante los diputados.