Emergencia Sanitaria para las Cloacas de Santa Rosa

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Atmosférico en canal a cielo abierto. Foto lograda con su teléfono celular por un vecino en la colectora Ruta 35 Sur (Barrios Portal del Sur y Escondido). La situación con la “mierda” en Santa Rosa no es nueva. La paradoja del destino es que empezó a manifestarse seriamente durante la intendencia de un bioquímico y ahora explota de manera altamente contaminante con la titularidad municipal de un ingeniero ecologista...

La Emergencia Sanitaria tendría vigencia hasta el 31 de diciembre de 2017 y alcanzaría al sistema de agua potable, a los desagües cloacales, a los desagües pluviales y a la disposición de las aguas de lluvia y freáticas.
El objeto primordial es habilitar los procedimientos administrativos necesarios para implementar, con la mayor celeridad y ejecutividad, las medidas pertinentes en resguardo de la salud de la población en riesgo.

Una vez vigente, la ley autoriza al Poder Ejecutivo Provincial a comprar bienes de capital, bienes de consumo y servicios y a contratar las obras necesarias para paliar o resolver esta emergencia, de acuerdo a los procedimientos previstos en las leyes de contabilidad y general de obras públicas. También se lo autoriza a gestionar y suscribir con el Estado Nacional los convenios técnicos y de financiamiento necesarios, que tengan por finalidad proyectar y concretar las obras afectadas a la emergencia.

Aguas fétidas a la Laguna
El problema sería tan grande, que las aguas cloacales estarían llegando a los espacios de agua de la Laguna Don Tomás, donde si bien esta señalizada la recomendación de no bañarse, aún se practica actividad deportiva náutica y de pesca y muchas mascotas familiares se zambullen a juguetear, con el consecuente daño posterior que puede sucederle a niños especialmente, que entran en contacto con ellas, ante la posibilidad de contagios de infecciones.

Atmosférico a cielo abierto
También vecinos de la zona Sur ubicados frente al Parque Industrial -que solicitaron resguardar su identidad-, fotografiaron camiones atmosféricos (ver foto en tapa y en esta nota) en el canal paralelo entre la colectora y la Ruta 35 (Av. Juan Manuel de Rosas).
Este canal a cielo abierto, hace años que tendría que haber sido entubado y cada verano se convierte en un foco infeccioso ideal para el habitat de insectos -mosquitos- que transmiten enfermedades que muchas veces son letales, como el Dengue o la Chikunguña, por nombrar sólo a dos.

Una paradoja para los últimos intendentes
Si todo esto esto es un hecho consumado -aguas servidas que llegan a la laguna y desperdicios fecales que se arrojan en barrios en continua expansión donde abundan planes financiados a nivel nacional-, sería una verdadera paradoja del destino para los intendentes que les ha tocado estos últimos años gobernar la capital pampeana.

¿Porqué decimos ésto?
Porque el período anterior lo ocupó un profesional bioquímico, que a pesar de que año tras año le señalamos desde esta página el tema del canal a cielo abierto, no supo o no pudo hacer nada.
Y ahora se da la otra paradoja, que justo a un intendente ingeniero que tanto ha bregado por la ecología y el medio ambiente desde una ONG, le toque este período donde todo parece explotar en las calles, con mal olor y contaminación extrema.

Quizá a los funcionarios se les ocurrió -para lograr una gestión exitosa- adoptar la costumbre del ambiente artístico que antes de salir al escenario se desean “mucha mierda”... pero les salió mal.