Los argentinos y las vacaciones

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Entre los que se fueron o se están por ir, muchos se inclinan por una salida fuera del país. Costos iguales o menores, más servicios y mejor atención, serían los motivos.

La agencia de investigación de mercado “Kantar TNS Gallup”, elaboró un informe interesante sobre las vacaciones, que arrojó datos de valor respecto a la forma en la que los argentinos decidieron planear sus vacaciones en 2017.
En el trabajo realizado se observa que los resultados dicen que un 67% decidió tomarse vacaciones en 2017; en comparación con un 74% en 2016, reflejando una muy leve baja.

Por otro lado, el informe de “Kantar TNS Gallup” concluye que el 51% decidieron viajar dentro o fuera del país y sólo un 16% optó por pasar las vacaciones en su casa...

¿Dentro o fuera del país?
Ahora bien, del 51% que decidió viajar dentro o fuera del país, merece una evaluación la actual temporada estival cuando los costos de destinos importantes entre nuestro país y los vecinos, en algunos casos son más bajos fuera de la frontera.
Lo hemos explicado otras veces: que para los que disponen de un mayor nivel de gasto, los que se pueden ir y viajar al exterior inclusive, a precios iguales, o con poca diferencia en más, prefieren una salida fuera del país.
La realidad del viajero frecuente que va a realizar una inversión importante en sus vacaciones, inclina la balanza además, por el mejor trato y servicio que se aprecia fuera de Argentina, lamentablemente.
Es difícil pronosticar qué nos pasa, pero aparentemente carecemos de algunas virtudes humanas que en otras latitudes hacen toda la diferencia.
En definitiva, las vacaciones son para desestresarnos, para mimarnos, para hacernos bien, para entrar en una frecuencia de relax y en ese sentido, Argentina parece seguir transmitiendo una mala onda generalizada que espanta.

En el mercado vacional, se aprecia poco interés por la compra o consulta de destinos nacionales, en tanto que se sigue vendiendo hasta último momento salidas en Cruceros, Brasil, Caribe y Estados Unidos. Otra tendencia es también, alquilar casas o departamentos en Chile, Brasil o Uruguay y armar el viaje por cuenta propia.
Es que a la hora de sacar cuentas para unas vacaciones de cierto nivel de gasto, llama la atención cómo en nuestro país los costos de hotelería y transporte a los destinos turísticos, a pesar de la situación recesiva y la falta de demanda, se mantienen altos.
No estamos hablando de ir en bus a Mar del Plata, Carlos Paz o Bariloche, sino de tener que volar, elegir hoteles buenos, comer comidas típicas del lugar, salir por la noche a un espectáculo y pagar las excursiones en el día. Está claro que en esa oferta, el país pierde.