Ya sea que esté adentro del hogar o en el exterior (balcón, terraza, patio); empotrado o colgados en un mueble o en una pared, móvil o fijo; tener y disfrutar de la propia barra de tragos es un placer posible y la madera es el material esencial para realizarlo. Los profesionales de CADAMDA -La Cámara de la Madera- nos dicen los detalles a tener en cuenta:
La madera es un material perfecto, ya considerado como el material de construcción del futuro gracias a sus características únicas. Mayor resistencia al fuego, es sustentable, reciclable y aislante, está colmada de innumerables diseños, colores, tonos y formas que la naturaleza le otorga, además de su gran versatilidad y capacidad de adaptación a geometrías complejas y todo tipo de proyectos arquitectónicos. Por su parte, cada vez más la tendencia de celebrar los momentos, de compartir en casa con amigos y seres queridos se evidencia en la sociedad. En tal sentido, hoy y gracias a las múltiples opciones disponibles en el mercado, tanto en maderas como en otros materiales complementarios, ese deseo es sencillo de cumplir.
Lo primero que hay que pensar y elegir es dónde se va a instalar o estar (en caso de ser movible) el bar o la barra. Puede ser en la terraza, en un balcón, en un rincón del living o comedor o incluso en la cocina, ya sea que se ubique empotrada en un mueble o en la pared. También es posible que -si se cuenta con los metros cuadrados y ambientes necesarios- se dedique una habitación específica para colocar un bar doméstico, la cual suele estar reservada también al área de juegos (playroom), en donde también puede encontrarse una mesa de billar, dardos, dispositivos tecnológicos y de música destinados a la recreación, biblioteca, sillones, etc.
Dependiendo de las opciones disponibles en cada hogar, lo que sí es seguro es que acomodar bebidas recreativas (incluso puede ser sólo de café, para los amantes de esta bebida, de té o de mate y productos relacionados, jugos tropicales, etc.) agrega siempre un plus al hogar y genera una excelentes impresiones a los invitados.
Generalmente, los espacios disponibles son pequeños, ya que se suele destinar para instalar un bar o una barra, algún rincón cercano a un sofá, a una lámpara y a un espacio de lectura. Es por ello que, muchas veces, esta zona cuenta simplemente con un pequeño aparador que hace las veces de mostrador, que junto a una cubitera o una camarera con ruedas completan el trío perfecto para crearse un pequeño bar casero.
En otras ocasiones, el propio mueble bar en el que se guardan las botellas puede contar con un pequeño mostrador oculto que se sube o baja haciendo las veces de barra de apoyo. Este tipo de muebles suelen colocarse en una esquina, ocupando muy poco espacio. Otras veces se destina la zona central de una estantería a almacenar licores, compartiendo con los libros una misma zona, dándole un toque que combina deco de estilo intelectual y Trendy al mismo tiempo.
Una opción distinta es colocar el área de bebidas cerca de la cocina, en ocasiones porque es complicado disponer de dos piletas en la casa (necesarios para lavar o enjuagar las copas, verter los hielos, etc.) En estos casos, lo ideal es contar con una, ya que de este modo se comparten ambas zonas. En estos casos, además, suele incorporarse una barra en la cocina que hace de separador de espacios y a la vez funciona como barra de bar.
Tipos de Madera
El tipo de madera a utilizar depende de diversos factores tales como la durabilidad, el costo, el peso, el color, la estabilidad y la fortaleza del material. Por ejemplo, el pino es una madera “suave” o “blanda”, es fácil de trabajar y no se necesitan herramientas costosas para obtener buenos resultados.
La madera presenta muchísimos tipos de clasificaciones ya que es un material con una gran variedad de propiedades, usos o procedencias. Entre estas formas de clasificar la madera la más extendida es la referente a sus características de dureza. Así, se engloban en dos grandes grupos: Las maderas blandas y las maderas duras.
Maderas Blandas: los árboles de crecimiento rápido, perennes y coníferas suelen ocupar el mayor porcentaje entre el tipo de maderas blandas. Algunas de las más utilizadas son: pino, álamo, olmo, ciprés, abeto, cedro, etc. El término blanda no equivale siempre a madera menos resistente; algunas pueden serlo y otras no tanto. En realidad, se refiere a que son más fáciles de trabajar y mucho más dúctiles.
Maderas Duras: Son más resistentes y trabajar con este tipo de madera es más complicado porque son menos lisas y tienen más irregularidades, sin embargo, darles forma con máquina suele ser más sencillo. Son las utilizadas para la construcción y la ebanistería, produciendo como resultado muebles de gran calidad y de excelentes acabados. Tienen un tratamiento más complicado, pero un mejor poder visual, dureza y resistencia al paso del tiempo.
Estos factores hacen que el precio de las maderas duras sea mayor respecto a las blandas. Las maderas duras provienen de árboles de crecimiento prolongado. Esto hace que para alcanzar el punto necesario para ser talados haya que esperar más tiempo, traduciéndose esto en un encarecimiento considerablemente. Entre las más utilizadas están: Caoba, Roble, Nogal, Teca, Olivo, Cerezo, Olmo, Fresno, etc.