La semana pasada reseñamos que durante el verano 2018 iniciamos un relevamiento de la mítica Ruta Nacional Nº 7 en Chile, conocida como “Carretera Austral”, que va desde Puerto Montt hasta Villa O’Higgins -y como titulamos en esa edición gráfica, llegamos hasta donde pudimos-. Son 1.300 km donde casi todo el recorrido terrestre es ripio -en buen estado de mantenimiento- y buena parte es por agua, cruzando los hermosos fiordos con la ayuda de barcos transbordadores (ver REGION® Nº 1304).
Actualmente la ruta está cortada por un alud ocurrido en el paraje Villa Santa Lucía, pero los datos que se consignan, tienen como objetivo empezar a planear para más adelante, teniendo en cuenta la época recomendable, que es desde octubre a marzo.
El recorrido, describíamos, resulta una aventura excéntrica y a la vez apasionante, que atrae a viajeros de todo el mundo, porque bien puede transitarlo un caminante, como un ciclista, alguien en moto, en un automóvil clásico y claro está, en camioneta o motorhome.
Como decíamos en la Parte 1 de esta serie de notas sobre la Carretera Austral chilena -Ruta Nacional Nº7CH-, la misma nace en Puerto Montt -el mejor sitio para abastecerse en todo lo que pueda necesitar durante el viaje- y permite llegar apenas un poco más allá de Villa O’Higgins -a 4 kms el camino finaliza en Puerto Bahamondes-, al sur de la Región de Aysén.
La ruta desde Puerto Montt, nos lleva rumbo a la pequeña localidad de Hornopirén -buen lugar para una primer parada-, desde donde podemos acceder a muchos Sitios de interés. Hornopirén está rodeada del parque nacional y es la bienvenida a esta zona plagada de árboles, vegetación, zona totalmente aislada que recuerdan a la Prehistoria.
Para continuar el viaje por la Carretera Austral, en Hornopirén nos aguarda el primer cruce en transbordador hasta Caleta Gonzalo, lugar que hicieron famoso Kristine y Douglas Tompkins, el filántropo conservacionista norteamericano, fallecido hace poco (ver www.tompkinsconservation.org)
Al llegar a Caleta Gonzalo, tras unas cinco horas y media de navegación, el camino nos traslada al pequeño pueblo chileno de Chaitén, que puede ser otra parada base para recorrer atractivos cercanos.
Chaitén es la zona que fue afectada por el volcán homónimo y aún cuenta con cenizas, testigo de lo que pasó. Sin embargo, poco a poco se fue retomando la vida en sus alrededores y hoy la pequeña localidad ofrece servicios de hotelería y gastronomía.
Como recomendación, no deje de visitar el restaurante “El Volcán”, para saborear el mejor Salmón Rosado, que acompañado con arroz resulta una combinación exquisita.
De Chaitén en adelante, el punto central es el pueblo de La Junta, considerado el centro de operaciones del viaje, donde se juntan diversos ríos que dan origen al nombre.
El lugar cuenta con pequeños hostales y residenciales sencillos. No se puede pretender demasiado alli.
Se pueden hacer paseos al Lago Rosselot y trekkings por el día para alcanzar miradores en el Parque Nacional Queulat o en Puyuhuapi...
En enero de 2018, cuando iniciamos varios relevamientos en Chile para publicar este año -Termas de Malalcahuello; Temuco; la hermosa Valdivia; Osorno, etc.-, sentamos base en Puerto Montt para comenzar una primera etapa de la Carretera Austral, aunque no pudimos avanzar más alla del lugar citado donde se produjo un gran alud de barro y piedras que causó estragos.
Precisamente, algo similar le sucedió a nuestro amigo lector Daniel Trabb, quien tras la nota publicada, nos escribió contando que hace pocas semanas, decidió “recorrer la Carretera Austral en sentido inverso: desde el Sur al Norte”, señalando: “Coincidimos en la belleza supina de cada lugar del sur chileno”.
Afortunadamente esta situación no afectó sus planes, ya que él mismo explicó: “En nuestro caso, nos dirigiamos a Futaleufú, hacia donde el tránsito fue habilitado -antes de llegar a la zona del desastre-, o sea, no modificó nuestro itinerario”.
No obstante, en su nota Daniel Trabb lamentó que este hecho en Santa Lucía “se llevó la vida de muchos de sus habitantes”.
De todas formas, periodísticamente no podemos quedarnos con esta dramática “foto” de la situación y si en cambio, bien podemos contar toda la “película” de este viaje -cuando se vuelva a habilitar este tramo-, en base a fuentes propias y de otros colaboradores.